La Realidad de la sanidad andaluza

La Juntad de Andalucía, gobernada históricamente por el PSOE y ahora más recientemente en conjunto con IU, ha sido siempre bandera de las políticas sociales y modelo de gestión para PSOE en toda España.

Con una campaña de hostigamiento contra la sanidad madrileña, (por cierto en los primeros puestos en cuanto a calidad) la izquierda ha querido desacreditar un modelo de gestión (la externalización de la gestión de hospitales públicos) que funciona en otras muchas Comunidades autónomas, siendo las más destacadas Cataluña y Andalucía las que más recurren a este formato de gestión púbico-privada.

En relación con ésta última, es importante conocer la verdadera realidad de la que no habla el PSOE, ni las mareas blancas ni CCOO ni UGT que se producen en Madrid al ser gobernada por el PP. 

En 2013, el Presupuesto de la Consejería de Salud asignó a este concepto 378 millones de euros, un 3,7 por ciento del total de las cuentas del departamento.  De los 88 hospitales que hay en Andalucía, 29 son totalmente públicos, 17 concertados con la Administración y 42 privados. Así Andalucía es la Comunidad que encabeza  la privatización de la sanidad en España. Pero allí no vemos ningún ciclo de protestas del estilo al de Madrid.  

La tasa de hospitales públicos por cada 100.000 habitantes es del 0,56 por ciento, por lo que la región andaluza es la tercera por la cola.  Pero hay más. Se trata de la Comunidad que menos gasta por habitante al año y, frente al mantra de la izquierda de los recortes del PP, la Junta andaluza recortará un 10,1% más para este año el gasto de la Consejería de sanidad respecto al pasado año. Pero han llegado más lejos e incluso hay hospitales como el Costa del Sol de Málaga que  han sido completamente privatizados. Además, en 2012 solicitó al Ministerio de Hacienda autorización para ceder a la gestión privada el Clínico de Granada, de titularidad pública. 

Son las cifras de las que no presumirá el PSOE, ni IU de Andalucía, ni por las que ninguna marea blanca o de cualquier otro color tomarán las calles en la comunidad andaluza, al tratarse de un caso más de la manipulación y demagogia de la que hacen gala la izquierda.