Ayer, 25 de Noviembre, Artur Mas tropezó con la voluntad del pueblo. El mismo que convocó unas elecciones para obtener una mayoría absoluta y plantear un proyecto separatista, por el cual Cataluña quedaría fuera de España, al final lo único que ha conseguido es hacer el ridículo perdiendo 12 escaños.
Tras tan sólo dos años de legislatura, el actual Presidente de la Generalitat durante el mes de septiembre convocó elecciones con el motivo del rechazo en Moncloa al pacto fiscal planteado a Rajoy. Artur Mas aprovechó esta situación para volver a sacar el tema del independentismo y así intentar aumentar el número de diputados en el Parlament.
Toda su campaña ha estado basada en la famosa frase “Espanya ens roba” y la infantil idea de que Cataluña estaría mejor fuera de España y en ningún momento ha propuesto nada para salir de la crisis. Aunque en realidad todo esto lo ha utilizado para tapar su mala gestión y el despilfarro en cosas inútiles realizado durante su mandato, como las embajadas en el exterior o la inmersión linguística.
Ayer la realidad volvió a imponerse y Artur Mas se encontró con que en Cataluña no creyeron en ningún momento su proyecto separatista, los resultados están a la vista, CiU consiguió ayer 50 diputados, 12 menos que en las elecciones de 2010. Aún así también hay que tener en cuenta que la totalidad de partidos independentistas han obtenido menos escaños en estas elecciones que en las del 2010.
Estos resultados no fueron ayer los únicos. El PSC, la marca catalana del PSOE, volvió a demostrar de nuevo que cada vez menos gente cree en el proyecto socialista, de los 28 diputados que obtuvo en 2010 ayer pasó a 20, una vez más el PSOE ha vuelto a descalabrarse en unas elecciones.
El PSC durante esta campaña se quiso desmarcar presentando un proyecto federalista que ni saben lo que es y ni mucho menos explicarlo además que no contaban con el apoyo total del PSOE y de Rubalcaba, por lo que esta falta de rumbo y de ideas ha hecho que finalmente vuelvan a estrellarse demostrando una vez más que el PSOE sigue en caida libre. Hay que recordar que el PSC en el 1999, con Pasqual Maragall, obtuvo 52 escaños y ahora sólo han tenido 20, siendo esto el resultado de un mensaje cada vez más difuso y menos creíble.
Finalmente una de las formaciones que mejor ha salido paradas en estas elecciones ha sido el Partido Popular de Cataluña, liderado por Alicia Sánchez Camacho, quien ha obtenido los mejores resultados en la historia del PPC. No solo ha aumentado el número de escaños, 20 diputados, sino que a su vez ha aumentado el número de votos a pesar de, en palabras de Cospedal, encontrarnos en un momento "tan complicado y tan difícil, con una crisis económica tan fuerte y un Gobierno que está tomando medidas imprescindibles y necesarias, pero difíciles e impopulares". Además el PPC es segunda fuerza en la ciudad de Barcelona y ocupar la tercera posición en el área metropolitana de Barcelona, en el cinturón rojo, mientras el PSC va retrocediendo.
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