Pero la intervención de Bankia como apuntan desde el PSOE, no ha sido cosa de un día. Y no podemos hacer otra cosa que darles toda la razón. Remontémonos al año 2010, cuando se produce la fusión de Caja Madrid y Bancaja a la que se adhieren La Caja de Canarias, Caixa Laixetana, Caja Ávila, Caja Segovia y Caja Rioja. Fernández Ordoñez, como gobernador del Banco de España, da el visto bueno a esta fusión. Si resulta que se agruparon las entidades con mayor número de hipotecas de toda España, y donde estaba puesto el dinero del ladrillo, ¿como es que a este Señor le pareció bien? Una de dos o hizo la vista gorda o no revisó el proceso, por lo que en ambos casos cometió una negligencia que hoy estamos pagando. Y si el partido socialista veía Bankia tan malo, ¿porqué no mostraron su desaprobación al gobernador?
Ni que decir cabe que el PSOE, que se encontraba por entonces en el Gobierno, estaba a favor de la fusión. Su teoría era que se unan y luego ya pues resolvemos el problema del saneamiento de las cajas. Como siempre todo para luego, lo mismo que hacían con las facturas, meterlas al cajón que ya se pagarán. El PP se mostró en contra, recomendando que primero se sanearan las cajas y luego se produjese la fusión para evitar situaciones como a la que hoy se enfrenta Bankia, y por tanto el Estado.
Ante estos datos hay que señalar que Férnandez Ordoñez, fue diputado por el PSOE, además de ser secretario de Estado tanto en la época de Zapatero como en la de Felipe Gónzalez y que fue impuesto como gobernador del Banco de España sin consenso institucional como se había hecho hasta entonces. Sabiendo esto, como es posible que el Señor Rubalcaba se atreva a culpar al Gobierno del PP de ser el culpable de intervenir a Bankia.
Ahora Mariano Rajoy debe ser responsable y sacar a Bankia de las garras de la quiebra, ya que otros se dedicaron a mirar hacia otro lado mientras la entidad iba cayendo en picado. Porque si el Gobierno permitiera que cayese, se produciría una situación tan terrible como la que ocurrió en Estados Unidos con la quiebra de Lehman Brothers. Y es que por mucho que se empeñen desde la izquierda (la cual por cierto tenía representantes en el consejo de administración de Bankia como Jose Antonio Moral Santin, de Izquierda Unida, y el ex ministro Virgilio Zapatero, del PSOE) en que caiga la banca, la regeneración del sistema financiero es absolutamente imprescindible para que la economía funcione.
Así que sabiendo todo esto ya podemos
decirle al señor Fernández Ordoñez, adiós y ¡hasta nunca!