Como si de la dama de la Revolución Francesa se tratara, Carmen Chacón, en el acto de homenaje a Gregorio Peces Barbas, levantó el puño y ondeó la bandera socialista al grito “Gregorio nos diría que de una puñetera vez levantemos el partido por la gente que nos necesita”. Al principio de las catástrofes, y cuando han terminado, se hace siempre algo de retórica. En el primer caso, aún no se ha perdido la costumbre; en el segundo, se ha recuperado. Es en el mismo momento de la desgracia cuando uno se acostumbra a la verdad. Y la verdad es que el PSOE, esta tocado y hundido, la división está servida y el ruido interno es ensordecedor.
En el intento de romper suspicacias, la momia salió del sarcófago para hacer un llamamiento y recuperar el apoyo de los españoles. Pero señor González ¿qué apoyo? Si no tenéis ni el de vuestras filas. Es entonces, cuando se abrió el cielo para iluminar liderazgo socialista de la profundidad de las cloacas. Aquel dirigente, sí, aquel Presidente que dejó a España con una Seguridad Social totalmente quebrada, que permitió un regimen de corrupción generalizada (Rumasa, Filesa, Luis Roldán...), que toleró unos crímenes de Estado que llevaron a la cárcel a su ministro de Interior y a su secretario de Estado, el mismo que contribuyó a sentar las bases del desmadre autonómico con sus concesiones nacionalistas. Se levanta ante los militantes socialistas 30 años más tarde para mostrarles el camino como si del mesías se tratase.
Lo cierto, es que tratan del capear el temporal como pueden, buscan construir un proyecto. Y para eso, ha dicho el PSOE, se debe hacer algo parecido a lo que hizo en 1982, no hacer un programa electoral más, sino hacer un proyecto en “profundidad” “Avanzar en el radicalislo reformista como hicimos entonces”
Rubalcaba insite en la “ riqueza, pluralidad y capacidad de expresión” mientras Carmen Chacón, Joan Mesquida, Pepe Griñan0… más los que quedan por numerar, fraguan sus espadas para cortar la rosa sin clavarse una espina.
Lo más sorprendente de esta larga trama, es su teoría final ante la división Pesoísta VS Socialista. “El mapa mediático está muy escorado hacia el PP y los Socialistas deben optar entre hablar de sí mismo o utilizar el poco espacio que le dan los medios para mostrar sus políticas”. Una vez más, como en todo, la culpa es del Partido Popular por gobernar.
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