Tras varios intentos de hacerse con el Gobierno de Navarra
esta vez, tanto Bildu como el PSOE van a por todas. Ya en el año 2007, el PSN
evitó pactar con los herederos de los batasunos pero tal es la desesperación
por tener poder que esta vez no van a dudar en echarse en brazos de ellos para
quedarse con Navarra.
Esta mañana la Vicesecretaria General del PSOE, Elena
Valenciano, afirmaba que “No vamos a ir con BILDU ni a la vuelta de la esquina”, pero pocas horas después, el Secretario General de la formación en
Navarra contestaba “El PSOE en Navarra soy yo”. Además por otro lado vemos las declaraciones de Eduardo Madina y Soraya Rodríguez proclamando "un nuevo tiempo en Navarra", es decir, otros que también apoyan la moción. Una de dos, o Valenciano miente
o Rubalcaba cada vez tiene menos capacidad de liderazgo, por no decir que
ninguna. El lío interno está servido.
Si los socialistas pretenden llegar al Gobierno de Navarra a
través de una moción de censura esta es inevitablemente de la mano de BILDU,
fundamentales apoyos, junto con Nafarroa Bai e Izquierda – Ezkerra. Por lo que queda en entredicho la actitud,
tanto del PSOE como del PSN, de que por el poder todo les vale, incluso ir de
la mano con los herederos de ETA.
De igual manera, la misma preocupación que demuestran con la
corrupción en Navarra la podrían mostrar en Andalucía con el escándalo de los
ERES, en donde, muchos de los imputados han pertenecido a la Junta de Andalucía
y han estado amparados bajo las siglas del PSOE. Y sin depurar
responsabilidades todavía.
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