Para el Gobierno de Mariano Rajoy el consenso es una de sus
prioridades principales a la hora de
realizar alguna modificación sobre leyes de gran calado. Hoy se ha vuelto a
demostrar de nuevo con la retirada del anteproyecto de ley para la reforma de
la ley del aborto. Con esta retirada el Gobierno ha dado una muestra de que sus
objetivos no están enfocados solo en contentar a una parte de la ciudadanía,
sino a todos en general. Con esta retirada no ha cometido el mismo error que
los socialistas en anteriores legislaturas derogando leyes a base de decretazo
dejándose llevar por el sectarismo.
El Partido Popular reflejaba en su programa una modificación
de la actual ley del aborto en el cual se defendía el derecho a la vida y el
refuerzo a las redes de apoyo a la maternidad. Esta reforma de gran calado
conlleva diferentes posiciones éticas y convicciones personales ya que es uno
de los asuntos más delicados actualmente, de igual manera debemos recordar que
este debate también ha sido muy manipulado por posiciones maniqueas o
interesadas.
La falta de consenso y retirada de la ley no conlleva que el
tema del aborto caiga completamente en el olvido. En el caso de las niñas de 16
y 17 años que deseen abortar esto deberá ser bajo el conocimiento y
consentimiento de los padres, se presentará un plan de apoyo para la familia y
se continuará buscando la fórmula más adecuada para reformar esta ley y llegar
a un consenso total.
No hay comentarios:
Publicar un comentario