Portada de La Razón. 29 marzo 2012 |
Como decimos, se trata de una huelga contra el Gobierno de Mariano Rajoy y en respuesta al recorte del 20% de las subvenciones que los sindicatos recibían de los Presupuestos Generales. En definitiva, una pataleta sindical que además protesta porque se les ha privado de la exclusividad de los cursos de formación a parados, teniendo menos dinero disponible para sus caprichitos. Esto es por lo que los sindicatos se echan hoy a la calle. ¿Y presumen de defender nuestros derechos como trabajadores?
Los sindicatos llevan siete años
preparándose para su momento. Y decimos suyo, porque tristemente hoy
habrá más personas que quieren trabajar y no pueden que individuos
secundando la huelga. Más de tres millones y medio de puestos de
trabajo destruidos durante los gobiernos del PSOE en siete años y no
han movido una pestaña. Comprendemos que cuando se obtienen
subvenciones “de gorra”, el estado de sumisión tiene que ser
mayor, pero vamos, así seguro que los sindicatos no defienden los
intereses de los trabajadores.
Nos parece estupendo que quien lo
desee vaya a la huelga, se tire de los pelos, proteste, “pancartee”
y lo que sea. Pero el que quiera ejercer su derecho al trabajo, lo
ejerza con plenas garantías y en libertad. ¿Por qué el pequeño
comerciante se tiene que sentir coaccionado y con miedo de abrir su
negocio ante la amenaza de los mal llamados “piquetes
informativos”? Así no se respeta el derecho a trabajar, que quede
claro.
Y aún hay más. El Partido
Socialista critica al Gobierno popular de acabar con el diálogo
social. Vamos, donde dije digo, digo Diego. Como expresó ayer a la
Vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, “el
diálogo social que tanto defienden ustedes es
una excusa para no dialogar cuando están en el
Gobierno y un eslogan para hacer oposición”.
Además el PSOE parece tener una
memoria parca y limitada. El que es ahora su líder, y entonces
Vicepresidente del Gobierno de ZP, dijo sobre la reforma laboral que
“ya estaba aprobada y que no se iba a tocar”. ¡¡Toma diálogo
social!! Posteriormente los sindicatos convocaron una tímida huelga
(no olvidemos que éstos debían sumisión a cambio de suculentas
subvenciones).
Por todos estos motivos, desde La
Gaviota Popular, os animamos a que acudáis a trabajar como hacéis
todos los días. Que ejerzáis plena y libremente el derecho
fundamental al trabajo y que, el que quiera secundar un fraude de
huelga que defiende los intereses exclusivamente de los sindicatos,
que lo haga, pero con respeto. Que nadie utilice la jornada de
huelga-fraude general para desatar la anarquía y saltarse el Estado
de Derecho por el Arco del Triunfo.
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