Estos días, tras el desafío secesionista de Artur Mas,
Mariano Rajoy decidió plantar cara a Junts Pel Sí y la CUP aunando fuerzas
entre diferentes partidos constitucionalistas con el único objetivo de defender
la unidad de España y el cumplimiento de la Ley. Por este motivo, Mariano Rajoy
ha anunciado encuentros con distintos líderes: Pedro Sánchez, Albert Rivera e
incluso a Pablo Iglesias.
Frente a este acto de defensa de España y soberanía
nacional, vemos el turbio interés partidista de Ciudadanos y de Albert Rivera.
Y es que los que ahora quieren utilizar el pacto como logro propio,
apropiándose del acuerdo de todos, en verano de 2014 ya rechazaron lo que ahora
Mariano Rajoy pone encima de la mesa. Y es que fue el PP con Maria Dolores de
Cospedal los primeros en proponer acuerdos entre partidos constitucionalistas y
cuestiones tan importantes como la defensa de la unidad nacional la lucha por
una Cataluña unida y garantizar que nadie en Cataluña inicie desde el Parlament
el proceso de ruptura. El mismo acuerdo que ya buscó además, Xavier García
Albiol y el PP catalán tras las últimas elecciones al Parlament de Cataluña.
¿Y cómo reaccionaron PSOE y Ciudadanos? En ambas ocasiones,
oponiéndose y tachando de todo acuerdo de imposible. Qué curioso.